De acuerdo con informes de medios como El Debate y OKDiario, la compañía familiar Playbol, que se especializa en la producción de plásticos y fue fundada por Pedro Sánchez Fernández -padre del actual presidente del Gobierno-, ha experimentado un significativo aumento en sus ingresos desde que su hijo comenzó su mandato en 2018. La cifra de negocio superó los 20,2 millones de euros durante ese tiempo.
La evolución financiera es significativa: de unos 1,3 millones de euros en 2018, a más de 3,5 millones en 2019, y 4,3 millones en 2022. Durante la pandemia, la empresa también recibió un préstamo millonario del Instituto de Crédito Oficial (ICO) dirigido por el Ministerio de Economía.
Además, se indica que el progenitor del mandatario organizó sus operaciones a través de una sociedad patrimonial denominada Industrias Plásticas Playbol SL, con el objetivo de dirigir las ganancias y, supuestamente, mejorar la gestión fiscal de su patrimonio, después de haberse separado oficialmente de la empresa original.
Ámbito gubernamental y entorno
En paralelo, figuras del Partido Popular han sostenido la existencia de sospechas sobre estos negocios, apelando a informes policiales que los califican como «hechos acreditados» desde hace una década. Aunque no se ha abierto una investigación judicial formal, el uso político de esta información ha sido constante.
Estas revelaciones se enmarcan dentro de un debate más amplio sobre la transparencia de la clase política y el papel de las redes familiares en el ascenso al poder. La utilización de recursos públicos durante la pandemia -como el préstamo ICO- en una empresa vinculada al entorno familiar del presidente levanta cuestionamientos sobre el vínculo entre lo privado y lo público, además del tipo de sociedad instrumental que se expone, al que el propio Pedro Sánchez ha criticado de manera insaciable.